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Charly Alberti: «Está en juego la especie humana»

En una entrevista exclusiva con LA NACIÓN Revista, el ex baterista de Soda Stereo explica su pasión por la sustentabilidad y la necesidad de concientizar sobre el cambio climático; también habla de Soda, Cerati y su visión de la política.

«La tecnología es el primer aliado que tiene el planeta», dispara Charly Alberti, ex baterista de Soda Stereo y alma máter de la Fundación Revolución 21, dedicada a concientizar sobre el cambio climático en América latina. Y advierte: «en los Estados Unidos está casi blanqueado que hay un grupo de poderosos que están pagando para que haya desinformación a raíz de que ellos tienen intereses y quieren seguir ganando dinero. Gente que sabe que la causa de gran parte de los problemas tiene que ver con sus empresas, con los combustibles fósiles, con la minería, etcétera».

Para cambiar esto es que Alberti creó su fundación: «la diferencia del ser humano con el resto de las especies es que tiene la capacidad para proyectar y planificar el futuro. Hoy pareciera que no estamos usando esa capacidad. El mundo que viene es absolutamente diferente, debido al tremendo impacto que realizamos día a día en todos los ecosistemas de los que dependemos como especie. Cuando uno habla de sustentabilidad, habla de medio ambiente, de economía y de la sociedad, ya que las tres están 100% vinculadas y ninguna se puede resolver sin tener en cuenta a las otras.»

En la extensa entrevista que LA NACIÓN Revista publicará este domingo, Alberti habla de todo. De política: «creo que los conceptos de izquierda y derecha desaparecen en el siglo XXI, porque son obsoletos y porque vas a empezar a hablar de sustentable y no sustentable. El político muchas veces llega a su lugar de poder con el cortoplacismo como principal eje regulador de sus acciones. A su vez, siento que a los gobernantes les pasa lo mismo que a muchos músicos y artistas: no saben manejar la fama y el poder.» De la música junto a Soda Stereo: «el plan después de 2007, después de la tremenda gira que hicimos, era continuar cada cinco años». De su evolución personal: «Me puse a hacer un taller de caligrafía, porque tengo ganas de pintar letras. Y me encanta. Antes de la gira de 2007 con Soda, llamé a mi viejo profesor de batería y le dije: ‘Quiero estudiar. De vuelta. Quiero venir a corregir todo, porque siento que no sé nada».

Fuente: Diario La Nación